1:4  Y estando juntos,  les mandó que no se fueran de Jerusalén,  sino que esperasen la promesa del Padre,  la cual,  les dijo,  oísteis de mí.

Y estando juntos,  les mandó que no se fueran de Jerusalén.
-    Jesús juntamente con sus discípulos estaban en Jerusalén.

-    Sus discípulos tenían planeado ir a otro lugar y Jesús les mando que no se fueran de Jerusalén.

-    Jerusalén era una ciudad donde se manifestaba el odio, violencia y persecución, fue allí donde Cristo fue tomado para ser crucificado, fue rechazado y es en ese mismo lugar escogido por Dios para que se cumpliera la promesa del Espíritu Santo. hay vendría el Espíritu Santo para convencer a la gente de pecado, de justicia y de juicio (Juan 16:9-11).

sino que esperasen la promesa del Padre,  la cual,  les dijo,  oísteis de mí.
-    la promesa del Padre. ¿Cuál es la promesa del Padre? Esta promesa era el Espíritu Santo profetizado por Joel (2:28–32), mencionada por Pedro (Hechos 2. 33), que se cumplió con la venida del Espíritu Santo en el Pentecostés (Hechos 2.1-4). Pablo Habla de esta promesa, compare con (Galatas 3.14; Efesios 1.13).

-    oísteis de mí. Es decir Jesús. Compare con (Lucas 24.49; Juan 14.16-17; 14.26; 15.26; 16.7-15).

-    El propósito de su ascensión era irse para que pudiera cumplirse la promesa del Padre, la venida del consolador (Juan 16: 17).